Butacas vacías… ¿Cuestión económica o cultural?


Un clásico o un musical, una obra de cámara o una función típica Americana, el teatro es mucho más que asistir a una puesta en escena, sin embargo, en México la apreciación hacia éste tipo de eventos culturales tuvo un declive notorio durante las últimas décadas. Por otro lado, las recientes tendencias pretenden rescatar éste arte y grandes producciones como Wicked, El Rey León, Hoy No Me Puedo Levantar, entre otras, han recuperado la atención del público en nuestro país, exponiendo que la industria del teatro posee un trasfondo mucho más complejo.

La ausencia del público mexicano en el teatro se debe a diversos factores, entre los cuales destaca la poca difusión, el alto costo de un boleto o simplemente la gran accesibilidad que se encuentra en otras industrias del espectáculo y el entretenimiento como el cine y la televisión. No obstante, la percepción que tiene nuestro país con respecto al teatro, resulta ser bastante errónea.

Grandes obras se pueden apreciar en diversos escenarios, con una gran variedad de costos y con una anticipada difusión, revelando que la razón más factible para nuestra gran cantidad de butacas vacías se debe principalmente al poco interés cultural que existe en nuestro país y a la falta de formación en el público.

Arrasan las producciones extranjeras

Aunque el público mexicano pareciera no mostrar gran interés por el teatro, las grandes producciones de Broadway adaptadas en nuestro país pretenden combatir este desapego. Wicked, El Rey León o Mary Poppins, son obras que la gente conoce y disfruta por sus historias, por lo que invertir en éstas producciones no es una simple apuesta.

Para conseguir un boleto de “El Rey León” existió una larga lista de espera, pues las personas interesadas no pudieron obtener un lugar como espectador hasta pasados algunos meses, sin embargo, el reposicionamiento y crecimiento de éste tipo de eventos culturales aún es un tema complicado para la industria del teatro en México pues no todas las obras de gran producción que se realizan en nuestro país logran cumplir sus metas en la taquilla.

En México, se calcula que el teatro está dirigido a un sector de nivel socioeconómico bastante alto, puesto que el precio de un boleto para una gran producción se encuentra alrededor de los mil pesos. Por otro lado, el porcentaje de personas que tienen la capacidad de pagar por una de estas funciones, sigue siendo bastante pequeño, pues consideran que el precio es sumamente excesivo si se compara con otros espectáculos y eventos artísticos.

Alonso Pineda, uno de los grandes productores de teatro en nuestro país, señala que el público mexicano no tiene consciencia sobre lo costoso que es hacer una gran producción teatral. “Los derechos de autor, el espectáculo, el boletaje, la nómina, publicidad, el mantenimiento del teatro. Todo esto se debe contemplar al momento de establecer el precio de un boleto, y al final gran parte de las producciones solo recuperan lo invertido, sin obtener ganancias.[1]

Comprar el boleto de una gran producción teatral mexicana es aproximadamente 45% más barato en comparación a una función en Broadway. Sin embargo, las producciones de alto nivel en nuestro país tienden a ser las mismas obras exhibidas en Broadway, supervisadas por el mismo equipo creativo, con la misma música, coreografías y escenografías, pero con el talento mexicano. “Si la gente apreciara o simplemente se percatara del trabajo que hay detrás de cada función, entendería el valor de cada boleto cada vez que asiste al teatro”[2], comenta Alonso Pineda sobre la recepción del público mexicano hacia las diferentes producciones teatrales.

¿Y el teatro nacional?

El teatro en México posee dos vertientes, el teatro comercial, cuyos boletos oscilan entre los cuatrocientos y mil doscientos pesos, y el teatro experimental, en el cual podemos encontrar funciones gratuitas, así como obras que cuestan entre treinta hasta cien pesos por puesta teatral.

A pesar que el precio de las grandes producciones extranjeras es un factor importante para la ausencia del público mexicano, el teatro sigue siendo un evento cultural accesible, no obstante, no se encuentra dentro de las preferencias del público mexicano al momento de asistir a un evento cultural o de espectáculo. México posee alrededor de 615 teatros en funcionamiento, siendo uno de los países con más recintos a nivel mundial, sin embargo, se calcula que aproximadamente el 90 por ciento de la población nunca ha asistido una función en toda su vida.

El cantante y actor Iker Paredes considera que las producciones mexicanas son bastantes buenas, y su calidad teatral se encuentra en un nivel tan competitivo como las funciones que provienen del extranjero. “Claros ejemplos podemos ver con obras como ‘Mentiras’ y ‘Si Nos Dejan’, obras 100% mexicanas donde se refleja la cultura de nuestro país.‘Los Monólogos de la Vagina’ logró llegar a los escenarios de Off Broadway.”[3] El actor considera que las producciones en nuestro país poseen grandes historias y buen material visual, sin embargo la poca publicidad y la falta de difusión, obstaculizan la consolidación del teatro mexicano en el gusto del público.

[1] Aldo Bonattelli, Entrevista a Alonso Pineda, México, D.F., 2015.

[2] Ibid.

[3] Aldo Bonattelli, Entrevista a Iker Paredes, México, D.F., 2015.

Aldo Ruíz Bonattelli